La geolocalización es el acto de posicionar un objeto dado, en movimiento o no, en el espacio y con coordenadas. Existen y han existido muchas técnicas para conocer su posición, y algunas todavía están mejorando las tecnologías. Las tecnologías de posicionamiento suelen estar vinculadas al desarrollo económico, social y científico de las sociedades. La geolocalización se utiliza constantemente, por ejemplo para optimizar el movimiento de personas, para seguir las rutas de las mercancías, para la seguridad, la salud, etc. Algunos incluso se inventaron para uso militar y más tarde se utilizaron en el dominio público.
¿Qué tecnologías se utilizan actualmente?
GPS (sistema de posicionamiento global)
El GPS opera un sistema establecido por los Estados Unidos y se basa en un sistema de posicionamiento por satélite. Es una tecnología creada con fines militares y promovida en 1973 por el gobierno. Los sensores GPS de los satélites que orbitan la tierra ayudan a calcular la posición geográfica, y por lo tanto a posicionarse de acuerdo a la latitud, longitud e incluso altitud del dispositivo a posicionar.
Ya en los años 90, Rusia también lanzó su propio sistema de geolocalización por satélite para competir con su rival americano, GLONASS. Fue operado por las fuerzas espaciales de la Federación de Rusia de 1990 a 1996, cuando Rusia ya no tenía el presupuesto para mantener una flota de satélites suficiente. Con la crisis de Rusia a finales de los 90, el lanzamiento operativo de este sistema se ralentizó y sólo volvió a ser operativo a partir de 2010.
Por último, Europa está siguiendo el ejemplo, con el desarrollo de un proyecto europeo de GPS, llamado GALILEO, para poner fin a la dependencia de los Estados Unidos y Rusia de los sistemas de posicionamiento. Al igual que el GPS y el GLONASS, GALILEO se basa en una flota de satélites para obtener la posición de un dispositivo. El proyecto fue lanzado a principios de la década de 2000, tras un acuerdo entre la Agencia Espacial Europea y la Unión Europea, y tiene la particularidad de ser sólo civil. Se supone que su precisión es de 4 metros horizontales y 8 metros de altura y para 2018 llegará a 200 millones de usuarios.
Al igual que sus competidores políticos y económicos, China también se ha equipado con un sistema de posicionamiento por satélite, ya en el año 2000, llamado Beidou y luego Compass. Se basa en la misma tecnología y, por lo tanto, tiene las mismas características que los sistemas anteriores establecidos en los Estados Unidos, Rusia y Europa. Todos ellos tienen un alcance global.
Y en la práctica, ¿cómo funciona la geolocalización de los satélites?
Toda la flota puesta en órbita permite que el cielo sea cuadrado, es decir, organizado en varios espacios. Dependiendo de la distancia a los satélites, podemos calcular la posición de cada dispositivo electrónico equipado con un chip. De hecho, la distancia de este receptor a por lo menos 4 satélites debe ser combinada para obtener suficiente precisión. El receptor puede estar en el suelo, en movimiento o en el aire. Sin embargo, sufre problemas en las zonas rurales, especialmente cuando el receptor se encuentra en un edificio, en un túnel, etc., porque la señal recibida afecta a la precisión de la tecnología.
Por metonimia a menudo usamos el término GPS, mientras que de hecho la mayoría de los teléfonos actualmente permiten el uso simultáneo de todos los sistemas GPS, Galileo, Glonass, Compass,...
El WPS (l)
El WPS es una técnica de posicionamiento que no utiliza satélites sino terminales Wifi cercanos para dar la posición de un receptor. Fue inventado por una empresa de Boston en 2005. La posición se determina de acuerdo con la intensidad de la señal recibida, pero depende en gran medida del número de puntos de acceso en las proximidades. Sigue siendo una técnica inestable, ya que depende de las variaciones de la señal entre cada terminal. Por esta razón, el WPS se utiliza principalmente en las zonas urbanas, ya que es aquí donde hay una gran red de terminales Wifi. Por lo tanto, ofrece una solución complementaria a la geolocalización de los satélites en las ciudades.
Geolocalización GSM
La geolocalización GSM utiliza la red de telefonía móvil, que permite las llamadas de voz y la transferencia de datos, y pasa a través de las antenas de los distintos operadores de telefonía. La precisión del posicionamiento está por lo tanto sujeta a la densidad de la red de antenas.
Identificación por radio
Ya sea RFID, Identificación por Radiofrecuencia, utiliza marcadores o etiquetas de radio para almacenar y recuperar datos a distancia. Por lo general, se trata de etiquetas adhesivas en los productos o chips utilizados para los animales, por ejemplo. Las etiquetas de radio consisten en una antena asociada a un microchip que les permite recibir y responder a las peticiones de radio del transceptor. Siempre tienen un identificador. Esta tecnología, utilizada desde 1935, tiene ahora aplicaciones en muchos ámbitos de la vida cotidiana, tanto en la esfera pública como en la privada. Desde 2005, los marcadores se han utilizado ampliamente en los pasaportes, el transporte o las tarjetas de pago, para ciertas mascotas como perros y gatos, etc...
Se trata de un sistema restrictivo, porque los marcadores sólo pueden recogerse en un campo de hasta 200 metros, tanto si son pasivos, es decir, que no emiten una posición, como si son activos, es decir, que emiten una posición.
Geocodificación
Esta técnica de geolocalización permite asignar coordenadas geográficas a una dirección. Se basa en el tratamiento automático de direcciones personales y profesionales, de puntos de interés particulares, etc... Las coordenadas geográficas se obtienen entonces para localizar cada lugar en un mapa digital. Es una técnica de geolocalización interesante, por ejemplo, en el caso de la orientación de la comercialización según criterios específicos. Aunque esta técnica es todavía imprecisa, ofrece la ventaja de poder agrupar de manera simple y precisa el conjunto de un grupo de personas, clientes, empresas, etc...
Desafortunadamente, pocas técnicas son completamente fiables, ya que algunas están todavía en desarrollo y mejora, como es el caso de la geolocalización de satélites. Otros dependen de la densidad de las redes en las que se basa, como GSM o WPS. Para una geolocalización precisa, lo óptimo es combinar las técnicas de geolocalización. Así, al cruzar las diferentes técnicas, podemos lograr una mayor fiabilidad y precisión en la estimación de la geolocalización.